La gota que colmó el amor platónico
Lo malo de sufrir en silencio, es precisamente eso, que solo tú sabes cuánto estás sufriendo. Nadie sabe leer la mente así que es imposible que los demás sepan lo que piensas y sientes si no lo dices. Marisa estuvo así varios años, sufriendo en silencio por un amor platónico, y llenando su vaso gota a gota hasta que hace unas semanas cayó la última y lo sacó todo… además…